Pasteles de calabaza

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Pasteles de calabaza

Si te ha picado la curiosidad y has llegado hasta aquí, te pido por favor que sigas leyendo la receta, la prepares y pruebes esta maravilla de postre. Solemos llamarlos «pastissets de carabassa» pero fuera de valencia se conocen como pasteles de calabaza. A mí personalmente son los que más me gustan.

Como ya sabes de la receta de pasteles de boniato, estos son dulces para la época navideña, ya que son muy típicos por Valencia en esas fechas, pero en mi casa gustan tanto que decidimos hacer una receta personal para otras épocas del año. De ahí nacieron para nosotros los pasteles de calabaza.

En fallas, en semana santa e incluso acercándonos al verano, solemos deleitarnos con estas delicias. La preparación de los mismos es exactamente igual que para los pasteles de boniato, simplemente cambiando el ingrediente de la confitura. A parte de esto, si lo haces con idea, preparas masa de obra y con ella hace unas deliciosas rosquillas de anis.

En el campo, mi suegro suele cultivar calabazas que están dulces y tienen mucha carne. Siempre que trae a casa aprovechamos para hacer pasteles de calabaza, y muchas veces además, cocinamos también buñuelos de calabaza. Estos últimos, por supuesto te enseñaré a prepararlos también.

⚠ ¡Consejo! Como en la receta de pasteles de boniato, es importante seguir a rajatabla tanto las proporciones exactas como los tiempos, de esta manera te saldrán de rechupete como el que te enseño en la imagen de abajo.

Ingredientes para unos 30 pasteles de calabaza

  • 1 vaso y medio de aceite de girasol (375 ml.)
  • 1 vaso de anís seco (250 ml.)
  • 1 vaso de agua (250 ml.)
  • 1 vaso de azúcar (250 gr.)
  • 800 gr. de azúcar para la confitura (más o menos, te lo explico luego)
  • 1 kg. de harina
  • 1 kg. de calabaza
  • 1 rama de canela
  • 2 cortezas de limón
Pastel de calabaza

¿Cómo hacer pasteles de calabaza?

⚠ ¡Detalle! Antes de nada debes preparar la confitura de calabaza un día antes de empezar con los pasteles

Para ello, en primer lugar, poner el horno a precalentar a 160ºC, con el calor arriba y abajo durante unos 10 minutos. Aprovechar en este tiempo para cortar un trozo de calabaza de 1 kg., con la ayuda de un cuchillo de hoja ancha.

A continuación, poner papel de hornear o de aluminio en la bandeja del horno, para no ensuciar mucho, y luego colocar encima, el trozo de calabaza cortado. Cuando se cumpla el tiempo de precalentado, introducir la bandeja en el horno con cuidado para no quemarte, más o menos centrada en altura.

Dejar hornear a 160ºC-170ºC durante 1 hora y media, hasta ver la calabaza dorada y al pincharla esté blandita. Luego, abrir la puerta del horno y con la ayuda de una manopla para no quemarte, sacar la bandeja con la calabaza y dejarla sobre una superficie plana.

Acto seguido, extraer la carne, limpiarla, meterla en la batidora hasta quedar bien triturada y pasarla por un pasapurés. Ahora pesar la cantidad de carne obtenida y preparar la misma cantidad de azúcar.

✏ Recuerda que el azúcar es un conservante y al mismo tiempo hace que la confitura tenga cuerpo, si pones poco azúcar te arriesgas a que te salga un poco líquida.

Coger un cazo e introducir el azúcar, 250 ml. de agua, la rama de canela y las 2 cortezas de limón. Inmediatamente, ponerlo al fuego a fuerza moderada y remover sin parar mientras se estén cociendo y reduciendo los ingredientes.

Comprobar si ya ha llegado al punto de hebra cada cierto tiempo, para ello hay que ir observando como va menguando la mezcla constantemente y cada vez revisarlo.

✏ Para ello coger un poco del almíbar del cazo con una cuchara, comprobar con los dedos que se pega y que al separarlos un poco se forma un hilo entre ambos que no se rompe. Ahora ya está en el punto de hebra.

En este momento, introducir la calabaza triturada en el almíbar y remover para que se fundan y fusionen todos los ingredientes durante unos 20 minutos.

Con el tiempo cumplido, apagar el fuego, retirar el cazo, dejar enfriar la confitura y una vez fría, guardarla en el frigorífico.

⚠ ¡Recordatorio! Al día siguiente realizar la masa de los pasteles.

Antes de nada, coger un bol, introducir 375 ml. de aceite de girasol, 250 gr. de azúcar, 250 ml. de anís seco y 1/2 kilo de harina. Amasar todo y añadir más harina hasta conseguir una masa homogénea, consistente pero no dura.

Seguidamente, coger trozos de esta masa, darle una forma esférica, estirarla sobre la encimera de la cocina y amasar hasta formar un círculo.

✏ Las medidas ideales de esta circunferencia son, unos 10 cm. de diámetro y un espesor de 1/2 cm. Comprobar la primera vez la cantidad de masa que necesitas para conseguirlo.

Ahora sacar la confitura del frigorífico y poner una cucharada sopera en el centro de la masa aplanada sobre la encimera. Después, doblar la masa sobre la confitura hasta cubrirla por completo y cerrarla presionando con los dedos, allá donde se necesite.

Repetir la operación tantas veces como se pueda, hasta terminar con alguno de los ingredientes (la masa o la confitura).

⚠ ¡Idea genial! Si te ha sobrado masa sabes que puedes aprovecharla para hacer unas rosquillas de anis deliciosas.

Luego, precalentar el horno a 200ºC con calor arriba y abajo durante unos 10 minutos. Aprovechar este momento para colocar 10 pasteles de calabaza en la bandeja del horno, procurando que no se toquen entre ellos.

Al finalizar el tiempo de precalentado, abrir la puerta del horno, introducir la bandeja con cuidado para no quemarte y dejarla centrada en altura. Dejar cocer unos 30 minutos.

Una vez pasado este intervalo, con la ayuda de una manopla para no lastimarse, sacar la bandeja con los pasteles de calabaza ya terminados.

Inmediatamente, dejar la bandeja sobre una superficie plana, colocar justo al lado de ella un buen trozo de papel de cocina y pasar los pasteles de calabaza uno a uno sobre el papel, dejándolos separados entre sí.

✏ Al utilizar el papel de cocina lo que hacemos es eliminar el posible exceso de aceite que se puede formar al hornearlos.

A continuación, repetir la operación y llenar la bandeja con otros 10 pasteles de calabaza preparados, y disponerlos como antes evitando que se toquen entre ellos.

Hornear exactamente igual, sacarlos del horno y dejarlos al lado de los anteriores, igualmente sobre papel de cocina. Repetir una tercera vez la operación y hacer los últimos 10 pasteles de calabaza.

Esperar a que se enfríen para pasarlos a un plato y ya los puedes servir para comer.

 

¡ BON PROFIT !

✏Conclusión

Si quieres comerte un postre delicioso, un dulce casero, auténtico, original y fácil de realizar, esta es la receta que estás buscando.

Estoy seguro que si jamás habías probado los pasteles de calabaza, cuando les des el primer bocado, su sabor ya no se te va a olvidar y te engancharán para siempre. Yo nunca puedo comerme uno sólo, siempre caen varios. Fíjate que cuando quedan pocos los voy racionando para poder comer algunos al día siguiente.

Ya me dirás si te gustaron y si te ocurre lo mismo que a mí y te los racionas también cuando se están acabando.

Al igual que con los pasteles de boniato, si quieres, siempre vas a tener ayuda para hacer la masa y vas a disfrutar de la alegría de todas las casas, los peques.

Pasteles de calabaza

Ahora si quieres . . .

Si te han parecido originales, te han gustado o simplemente te apetece compartir la receta con alguien, te agradecería mucho el gesto ya que me estarías ayudando a fomentar los postres caseros y a huir de la bollería industrial.

Cualquier pregunta, consulta, crítica, comentario o lo que sea, puedes dejarlo y te responderé con atención, ya que lo mereces por haber invertido tu tiempo leyendo mi blog.

 

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Pasteles de calabaza
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